En Colón, corte de ruta y asamblea
A pesar de las amenazas del Gobierno
Desde el viernes 16 a las 18 hasta el sábado 17 a las 20 horas, las asambleas ambientales de Gualeguaychú y Colón llevaron adelante una protesta en el puente internacional que une Colón (Entre Ríos) con Paysandú (Uruguay). La acción consistió en cortes parciales e intermitentes del paso de Argentina a Uruguay, en volanteadas a todos los autos que se acercaban y en un acampe a la vera de la ruta denunciando la contaminación de Botnia y la complicidad de los gobiernos de Uruguay, Argentina y la provincia de Entre Ríos con el pulpo capitalista contaminador.
Las amenazas de represión de los gobiernos nacional y provincial (de hecho, enviaron un fuerte contingente de Gendarmería), la campaña en los medios de comunicación y las presiones desde Grecia (sic) del gobernador Urribarri no pudieron con los asambleístas ni con las delegaciones que se acercaron a acompañarlos. El sábado, a las 20 horas, una asamblea evaluó que se habían cumplido los objetivos de la acción (corte, volanteo, publicidad de los reclamos) y decidió levantar el acampe. La política de desgaste que el gobierno impulsa contra la Asamblea de Gualeguaychú en particular tiene varios motivos. Por un lado, la negociación de Kirchner con Tabaré por la presidencia de Unasur: Tabaré retiraría el veto a Kirchner si hace levantar el corte del puente Gualeguaychú-Fray Bentos. Por el otro, defender su política minera (veto a la Ley de glaciares). La Asamblea de Gualeguaychú es la que logró, hace dos años, poner en pie un movimiento nacional ambiental contra los pulpos contaminadores. Golpear y derrotar a Gualeguaychú significa, para el kirchnerismo, infringir una derrota al movimiento nacional ambiental y atomizardo.Una delegación de compañeras y compañeros del Partido Obrero y de Tribuna Ambiental acampamos las 48 horas en el corte con los asambleístas. Estamos empeñados en construir una corriente política obrero-ambiental que, con un programa discutido de cara al pueblo de Entre Ríos y de todo el país, ponga en pie una alternativa para terminar con la contaminación no sólo de Botnia, sino también de las mineras y de cada uno de los pulpos capitalistas que llevan adelante la depredación laboral y ambiental con el necesario aval de los actuales y anteriores gobiernos nacionales y provinciales.
Fabiola Ferro
A pesar de las amenazas del Gobierno
Desde el viernes 16 a las 18 hasta el sábado 17 a las 20 horas, las asambleas ambientales de Gualeguaychú y Colón llevaron adelante una protesta en el puente internacional que une Colón (Entre Ríos) con Paysandú (Uruguay). La acción consistió en cortes parciales e intermitentes del paso de Argentina a Uruguay, en volanteadas a todos los autos que se acercaban y en un acampe a la vera de la ruta denunciando la contaminación de Botnia y la complicidad de los gobiernos de Uruguay, Argentina y la provincia de Entre Ríos con el pulpo capitalista contaminador.
Las amenazas de represión de los gobiernos nacional y provincial (de hecho, enviaron un fuerte contingente de Gendarmería), la campaña en los medios de comunicación y las presiones desde Grecia (sic) del gobernador Urribarri no pudieron con los asambleístas ni con las delegaciones que se acercaron a acompañarlos. El sábado, a las 20 horas, una asamblea evaluó que se habían cumplido los objetivos de la acción (corte, volanteo, publicidad de los reclamos) y decidió levantar el acampe. La política de desgaste que el gobierno impulsa contra la Asamblea de Gualeguaychú en particular tiene varios motivos. Por un lado, la negociación de Kirchner con Tabaré por la presidencia de Unasur: Tabaré retiraría el veto a Kirchner si hace levantar el corte del puente Gualeguaychú-Fray Bentos. Por el otro, defender su política minera (veto a la Ley de glaciares). La Asamblea de Gualeguaychú es la que logró, hace dos años, poner en pie un movimiento nacional ambiental contra los pulpos contaminadores. Golpear y derrotar a Gualeguaychú significa, para el kirchnerismo, infringir una derrota al movimiento nacional ambiental y atomizardo.Una delegación de compañeras y compañeros del Partido Obrero y de Tribuna Ambiental acampamos las 48 horas en el corte con los asambleístas. Estamos empeñados en construir una corriente política obrero-ambiental que, con un programa discutido de cara al pueblo de Entre Ríos y de todo el país, ponga en pie una alternativa para terminar con la contaminación no sólo de Botnia, sino también de las mineras y de cada uno de los pulpos capitalistas que llevan adelante la depredación laboral y ambiental con el necesario aval de los actuales y anteriores gobiernos nacionales y provinciales.
Fabiola Ferro
0 comment(s) to... “
”