Gualeguaychú: No logran levantar el corte
La Asamblea de Gualeguaychú -que mantiene el corte contra la instalación de Botnia desde hace más de dos años- está discutiendo extender los cortes de ruta a Concordia y Colón durante el verano. "Con un guiño de la Casa Rosada", el gobernador entrerriano, Sergio Urribarri, "intentó disuadirlos" pero "el ríspido encuentro" concluyó en un fracaso. La desopilante propuesta de Urribarri era que levantaran el corte a cambio de que el gobierno cooperara "en el sostenimiento de la continuidad de una estrategia de concientización, basada en elementos simbólicos que tienen mucho más impacto que la imagen decadente de un tronco atravesado en una ruta internacional" (sic).
Los asambleístas rechazaron la presión del gobernador y lo tildaron de mentiroso, porque en la reunión nunca dijo lo que declaró después: "Les dije que el corte es una medida ilegal, que mi gobierno no puede apoyar y que sólo está perjudicando y dejando sin trabajo a los argentinos" (La Nación, 3/11).
La reunión se realizó días después de que Urribarri afirmara que no existen datos que demuestren que Botnia contamina. Los asambleístas adjudicaron sus palabras "a presuntas instrucciones del gobierno para terminar con las protestas cuanto antes". El gobierno "no puede, por el momento, torcer el brazo de los asambleístas, y cree que podría provocar el efecto contrario al deseado si decide ahondar su dureza" (ídem). El corte es apoyado por el presidente de la Federación Agraria provincial, Alfredo De Angeli: "Si nosotros levantamos el corte en la 136 se acaba la lucha, hoy estamos hablando porque está cortada la ruta", dijo (Clarín, 3/11).
La respuesta de los asambleístas respecto de la no contaminación de Botnia fue aniquilatoria. Probaron que Urribarri repetía un falso informe publicado en La Nación (28/12), que tergiversaba declaraciones de la ONG Green Cross. Según ese diario, los estudios de la ONG determinaban que Botnia no contamina el aire. En realidad, Green Cross denunció que no pudo efectuar las mediciones "y que fueron engañados en una nota anterior de La Nación al publicar un titular engañoso sobre este mismo tema" (APF, 5/1; http://www.noalaspapeleras.com.ar/)
Olga Cristóbal
La Asamblea de Gualeguaychú -que mantiene el corte contra la instalación de Botnia desde hace más de dos años- está discutiendo extender los cortes de ruta a Concordia y Colón durante el verano. "Con un guiño de la Casa Rosada", el gobernador entrerriano, Sergio Urribarri, "intentó disuadirlos" pero "el ríspido encuentro" concluyó en un fracaso. La desopilante propuesta de Urribarri era que levantaran el corte a cambio de que el gobierno cooperara "en el sostenimiento de la continuidad de una estrategia de concientización, basada en elementos simbólicos que tienen mucho más impacto que la imagen decadente de un tronco atravesado en una ruta internacional" (sic).
Los asambleístas rechazaron la presión del gobernador y lo tildaron de mentiroso, porque en la reunión nunca dijo lo que declaró después: "Les dije que el corte es una medida ilegal, que mi gobierno no puede apoyar y que sólo está perjudicando y dejando sin trabajo a los argentinos" (La Nación, 3/11).
La reunión se realizó días después de que Urribarri afirmara que no existen datos que demuestren que Botnia contamina. Los asambleístas adjudicaron sus palabras "a presuntas instrucciones del gobierno para terminar con las protestas cuanto antes". El gobierno "no puede, por el momento, torcer el brazo de los asambleístas, y cree que podría provocar el efecto contrario al deseado si decide ahondar su dureza" (ídem). El corte es apoyado por el presidente de la Federación Agraria provincial, Alfredo De Angeli: "Si nosotros levantamos el corte en la 136 se acaba la lucha, hoy estamos hablando porque está cortada la ruta", dijo (Clarín, 3/11).
La respuesta de los asambleístas respecto de la no contaminación de Botnia fue aniquilatoria. Probaron que Urribarri repetía un falso informe publicado en La Nación (28/12), que tergiversaba declaraciones de la ONG Green Cross. Según ese diario, los estudios de la ONG determinaban que Botnia no contamina el aire. En realidad, Green Cross denunció que no pudo efectuar las mediciones "y que fueron engañados en una nota anterior de La Nación al publicar un titular engañoso sobre este mismo tema" (APF, 5/1; http://www.noalaspapeleras.com.ar/)
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